
En administración de empresas, solemos pensar que la realidad organizacional se puede definir desde la oficina del director general o con un manual de cultura. Pero ¿y si te dijera que la realidad de tu empresa no es una sola, sino muchas, y todas construidas socialmente?
Sí, así como lo lees. Esta idea cobra fuerza tras ver el cortometraje “Psicópolis, La realidad es una construcción social” publicado en YouTube, una representación que parece sacada de cualquier reunión laboral donde todos obedecen sin saber por qué.
¿Qué significa que la realidad es construida socialmente?
Significa que lo que creemos como “normal” o “correcto” en el trabajo no es una verdad universal, sino un acuerdo social entre las personas que interactúan. Cada empresa, e incluso cada centro de negocio dentro de una misma organización, crea su propia cultura, normas, roles y dinámicas internas.
Y sí, esto también aplica para tu empresa.
El caso de los centros de negocio: muchas realidades dentro de una sola empresa
En México, no es raro ver empresas con varias sucursales donde cada una “se maneja diferente”. Lo curioso es que aunque el logotipo y las políticas sean las mismas, las personas construyen realidades distintas.
¿La razón? Muy simple:
- El estilo del gerente local cambia la dinámica.
- La cultura regional influye en el ambiente laboral.
- Las costumbres informales se imponen a lo que dice el reglamento.
Por ejemplo: En una misma empresa nacional, la sede en Mérida puede tener una cultura cercana y colaborativa, mientras que la de Monterrey puede ser más jerárquica y orientada al resultado. ¿Mismo corporativo? Sí. ¿Misma realidad? No.
¿Y si una mala cultura local contamina todo el sistema?
Aquí viene el gran riesgo: una sede con mal clima laboral puede afectar la percepción social de TODA la empresa. Así como pasa con los restaurantes, basta una mala reseña para que los demás empiecen a dudar.
- Sitios como Glassdoor o Indeed no diferencian entre sedes: una mala reseña de “la sucursal A” daña la imagen de la empresa completa.
- Los candidatos investigan: si escuchan que “ahí tratan mal a los empleados”, evitarán postularse aunque la vacante esté en otra ciudad.
- Los clientes también perciben: si una unidad tiene problemas de atención o rotación constante, el impacto puede ser comercial.
Lo que pasa dentro se parece a lo que muestra el cortometraje
En el video de Psicópolis, los estudiantes obedecen órdenes absurdas, aceptan roles sin discutirlos y siguen al grupo por presión social. ¿Te suena familiar?
En muchas empresas sucede lo mismo:
- Empleados que obedecen sin cuestionar, aunque vean algo incorrecto.
- Personas que dicen “eso no me toca” porque su rol los limita.
- Equipos que normalizan ambientes tóxicos porque “así siempre ha sido”.
¿Qué podemos hacer desde la administración?
Si administras una empresa o un equipo, aquí te dejamos algunas acciones clave:
- Diagnostica cada centro como un ecosistema único. No des por hecho que la cultura es igual en todos lados.
- Forma líderes que comprendan lo social, no solo lo operativo. Necesitamos menos jefes técnicos y más líderes humanos.
- Fomenta el pensamiento crítico. Invita a los equipos a cuestionar, proponer y hablar. No temas al desacuerdo, es síntoma de salud organizacional.
- Escucha lo que se dice afuera. Lo que se publica en redes y portales de empleo es parte de tu realidad corporativa también.
En Cumulos MX creemos que la tecnología ayuda, pero comprender la dinámica humana en las organizaciones es fundamental para administrarlas mejor. Cada empresa vive su propia realidad, y esa realidad se construye todos los días, en cada interacción, decisión y conversación.
No se trata de imponer una cultura perfecta desde arriba, sino de construir, cuidar y evolucionar la realidad organizacional de forma consciente, con sentido común y sensibilidad humana.
¿Quieres llevar esta reflexión a tu empresa? En Cumulos MX podemos ayudarte
Cortometraje: Psicópolis; Año 2012
Loasur Studios; Dirección: Miguel Mérida; Guion: Andrés Lomeña Cantos